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La jardinería es con toda certeza un estado mental y definitivamente más que un trabajo e incluso una pasión. La creciente conciencia de las personas que miran el mundo a través de gafas de color verde nos permite percibir el huerto de una manera muy amplia, incluso holística. Y mientras que las empresas de jardinería, como la nuestra, se centran en “curar” el huerto, mejorar su estado y apariencia, vale la pena recordar un tema de creciente popularidad: la curación mediante el huerto, la hortoterapia.

La hortoterapia es un método de terapia, cuya eficacia se debe a la realización de trabajos físicos en el huerto, puesto que no es necesario convencer a nadie de que el contacto con la naturaleza tiene un efecto saludable en el estado de salud de las personas tanto sanas, así como con trastornos, disfunciones o enfermedades físicas y mentales de todo tipo.

Todo esto fue descubierto hace mucho tiempo, cuando Edward Osborne Wilson anunció la teoría de la biofilia. En su opinión, ya en la etapa de la evolución, el hombre ha sido programado genéticamente para responder positivamente al medio ambiente, lo que fortalece el sentido de seguridad y paz y, en consecuencia, facilita la recuperación de la fuerza y la salud. Entre otras cosas, por esta razón, en los hospitales se instalaban jardines y los sanatorios se ubicaban en hermosos entornos naturales. Hoy en día, por supuesto, la prioridad es el factor económico, ¿pero quizás valga la pena recordar las razones originales?

En la hortoterapia, se buscan alternativas a las ya extensas actividades existentes de integración sensorial, coordinación motora y manual. Este campo se ha desarrollado hasta tal punto que cada vez más centros académicos ofrecen estudios de posgrado en esta disciplina. Así, uno de los primeros ejemplos fue la Universidad de Ciencias Naturales de Poznań, donde la decana de la facultad es la dr hab. Agnieszka Krzymińska. Citando la información de la página web: “El objetivo principal de los Estudios de Postgrado de Hortoterapia es formar a un personal profesional para la implementación de la terapia ocupacional en el campo de la jardinería. Los graduados de estudios poseerán competencias para realizar y supervisar terapias para diversos grupos sociales. Esto se aplica tanto a la sección de edad (niños, adolescentes, adultos, ancianos), a las formas de discapacidad psicomotora, como a otras limitaciones que excluyen a las personas de la vida activa en la sociedad, por ejemplo, debido a deficiencias intelectuales, enfermedades mentales o como resultado del aislamiento (tratamiento de la adicción, centros penitenciarios con un bajo nivel de restricciones) y otros”.

Cuando hablamos sobre la hortoterapia, no podemos dejar de pensar en los huertos diseñados para personas con discapacidades. ¿Seguro que esta tendencia está bien desarrollada entre los arquitectos paisajistas? ¿Se han desarrollado tales soluciones para senderos y callejones tanto en jardines y huertos domésticos como parques o jardines botánicos para que las sillas de ruedas puedan atravesarlos con facilidad? ¿Han tenido los diseñadores y contratistas en cuenta las cajoneras elevadas con las que puedan trabajar las personas con discapacidad? Y finalmente, ¿nosotros, los fabricantes, pensamos en la hortoterapia como en la necesidad de crear herramientas amigables que no solo sean ergonómicas, sino también dedicadas a aquellos que necesitan soluciones muy específicas?